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oh! my ladylord

El poder que tiene Twitter y seguir cuentas de dramas es que te enteras mejor de las novedades que se acercan. Cuando se anunció que Nana, a la que apenas conocía, pero me parece una mujer guapísima, iba a protagonizar una comedia romántica junto a Lee Min-ki, al que vi en Because this is my first love y me encantó, no dudé en poner el drama en la lista.

Como el streaming lo hacía IQIYI y la tenían puesta en VIP, decidí verla cuando finalizase y ya me la bajaría en algún momento. Lo que no sabía mi yo de marzo era que acabaría haciéndome un vip de iqiyi en mayo para poder ver My roommate is a gumiho en emisión 😂 Así es como acabé viéndome Oh! My Ladylord entre la primera y la segunda semana de emisión del gumiho 😅

Oh! My Ladylord se emitió en la cadena pública MBC entre el 24 de marzo y el 13 de mayo de 2021. Tiene 16 episodios, que se emitieron en dos partes, y está protagonizada, como dije antes, por Nana y Lee Min-ki, acompañados por Kang Min-hyuk.

Cuenta la historia de Oh Ju-in, una actriz de éxito, la reina de las comedias románticas, y Han Bi-su, un conocido guionista de thrillers con muy mal carácter.

Han Bi-su despide a la actriz principal de su nuevo drama porque no le parece que interprete a la protagonista como él quiere, y Oh Ju-in que siempre ha querido trabajar con él, intenta que la acepte como lead. Pero Han Bi-su tiene otra actriz en mente y vuelve a rechazarla (ya la había rechazado anteriormente). Un incidente con la nueva actriz genera un escándalo y los productores le ponen como condición que consiga que Oh Ju-in acepte el papel.

Entre tanto, la madre de Han Bi-su que está empeñada en hacer que este vuelva a vivir en la casa materna, vende la casa tradicional donde vive su hijo a Oh Ju-in. Una serie de sucesos llevan a que Han Bi-su se convierta en el inquilino de Oh Ju-in en su nueva casa.

Hay varias cosas que me gustaron mucho en este drama. Una de ellas es Nana. Me encantó su personaje, me encantó ella como actriz y me encantó la química que tiene con Lee Min-ki. Mi teoría es que Nana es una Park Min-young 2.0 y tiene química hasta con las piedras… Yo personalmente me casaría con ella si me lo pide 😂 La historia de amor me pareció muy bonita, si bien no está llevada del todo bien, y los besos, aunque tardan en llegar, son de los que acaban en listas de mejores besos.

Otra de las cosas que destacaría de este drama es la subtrama de las madres de los protagonistas. Aquí no se conocen ellos de pequeños, sino que son sus madres las que se conocen del instituto y se reencuentran ahora cuando la madre de Bi-su decide buscar a sus amigos de juventud con los que había perdido el contacto. Eso también incluye al dueño de la tienda de discos en la que Bi-su pasa mucho tiempo. El hilo rojo del destino y todo eso, ya sabéis como va esto en los dramas coreanos.

Y por último, lo que también me gustó mucho fue la amistad entre Ju-in y Yu-jin (Kang Min-hyuk). Si bien él es un poco pelmazo porque tiene un crush con ella desde el instituto y se piensa que con tiempo y una caña todo es posible, la amistad que tienen me pareció muy realista y muy bonita.

¿Todo lo demás? meeeeeeeeeh. Las parejas secundarias me parecieron muy cansinas y aburridas y sus escenas acabé pasándomelas en x4. en general los personajes secundarios no me gustaron nada. No había un buen ensemble apoyando a los principales, salvo quizá el grupo de las madres, y ni eso, porque sus interacciones eran demasiado melancólicas y acabaron también aburriendo.

Y ahora viene el RANT y aviso porque quien avisa no es traidor. A partir de aquí, voy a soltar spoilers… Si quieres saltártelo todo e ir directamente a la música, puedes seguir leyendo aquí.

Este drama me lo vendieron como una comedia romántica, pero ¡es men-ti-ra! Una comedia romántica tiene por definición un final feliz, y si no lo tiene, no es una comedia romántica, señores… es otra cosa.

El final ha sido una decepción porque no te lo esperas (o no quieres esperártelo). pero el drama cojea tanto por todos lados, que es un milagro que consiguiese tener un mínimo de consistencia.

Uno de los principales fallos es la mezcla de géneros: comedia romántica, melodrama, fantasía, tragedia… Todo junto en la coctelera, pero sin orden ni concierto… Otro fallo se debe a un desequilibrio bastante gordo entre una trama principal prácticamente inexistente (o basada únicamente en la historia de amor) y mil doscientas subtramas y momentos random en el guion, que vienen y se van sin servir un propósito (como por ejemplo el tema del padre adoptivo que desaparece una vez el trauma se pasa, a mitad de la serie; o lo de la sasaeng que se resuelve en medio episodio). Y otro de los fallos es el elemento fantástico que usan solo cuando les conviene y está, en mi opinión, muy mal introducido en la historia.

Al principio de Oh! My Ladylord introducen un componente fantástico de pasada: El protagonista tiene un accidente, que en condiciones normales habría sido mortal, pero milagrosamente sobrevive y despierta en el hospital después de 3 días en coma. A lo largo de los primeros episodios del drama, de alguna forma dejan caer a medias que alguien lo salvó de morir, pero no dan muchos más datos. Simplemente se le aparece un señor de blanco de vez en cuando diciéndole que aproveche el tiempo que le queda, que vivir sin amor no tiene sentido, que se va a desaparecer pasados tantos días, etc.

El principal problema es que el final del drama (y los últimos episodios) está MUY condicionado por ese detalle fantástico, pero en ningún momento le dan la importancia que deben (el señor de blanco sale 4 veces en todo el drama, una de las veces simplemente pa explicar quién es).

La fantasía se usa como plot device para casi todo lo que tiene que ver con la pareja en los episodios finales, pero anteriormente se te olvida que existe ese componente (y al final, a veces también). Introducen tantos otros temas: su trauma de juventud, la enfermedad de su madre, los amigos reencontrándose, el triángulo amoroso, etc. que se les olvida que han mencionado que el protagonista se nos muere o algo así y no parece haber forma de evitarlo (porque tampoco hay reglas ni nada de eso). Y ese es el fallo principal: el protagonista tiene un destino fatídico hacia el que vamos avanzando a lo largo del drama, pero se nos olvida constantemente cómo va a acabar 🤨 No sé muy bien cuál era el fin último de este elemento, pero quiero creer que era hacer cambiar al protagonista y convertirlo en una persona que puede amar y ser amado. Sinceramente, hay formas mucho mejores de hacerlo, que lo que hicieron en este drama.

Aparte, el protagonista va a «desaparecer», que no morir, no… desaparecer, desvanecerse, esfumarse, hacer «¡puff!» y dejar este plano de existencia. ¿Explican por qué «desaparece» y no se muere? No, ¿pa qué? pero hay escenas muy creepys cuando es invisible y está en la misma habitación que Ju-in. Supongo que necesitaban ese detalle para introducir esas escenas. aunque esto bien podria ser una duda existencial del tipo «¿qué fue antes: el huevo o la gallina?», del palo: ¿Qué fue antes: la idea mala de desaparecerse o el elemento fantástico para que desaparezca? Me pregunto cómo se lo explicaron a la gente cercana, ¿les dirían que se fue de viaje? 🤔

Esto es un fallo que he visto muy a menudo en los dramas que incorporan fantasía en el mundo real. los guionistas utilizan el elemento fantástico como su deus ex machina particular para sacar las castañas del fuego de la trama cuando les viene bien, pero el resto del tiempo se olvidan de él para concentrarse en la historia de amor (o las doscientas situaciones adicionales y subtramas). Se olvidan de la fantasía, hasta que tienen que liarla de alguna forma y vuelven a recurrir a ese as en la manga que tienen ahí guardado.

De todos los dramas en los que he visto instrumentalizar la fantasía para hacer que la trama siga un determinado sendero, este ha sido el peor de todos y no solo por el final. Habría aceptado el final (y el drama) mucho mejor si lo hubiesen entrelazado con la trama de una forma más natural y menos «porque lo digo yo». También lo habría aceptado mejor, si en general el drama hubiese tenido una trama consistente y no un batiburrillo de escenas bonitas, mezcladas con situaciones sin ningún nexo entre ellas.

Sinceramente, el final de Do do sol sol la la sol levantó escamas por traumatico y sinsentido, pero lo prefiero mil veces al de Oh! My ladylord 🤷🏻‍♀️

escanea este código con la app de spotify para escuchar la bso de oh! my ladylord

Con respecto a la música, la banda sonora tuvo 6 partes, pero pasaron sin pena ni gloria por el mundo, me temo. Son casi todas baladas a excepción de la primera y a mí me gustaron mucho todas ellas. Sorprendentemente a pesar de que hay una canción de K.Will, que es un cantante que me encanta, mi favorita la canta U Sung Eun y se titula I wish my heart would reach you. Remember your day de Han Dong Geun también suena mucho en el drama y es una balada muy bonita (y al principio, confundí su voz con la de K. Will 🙈). El dueto que cantan Kang Seung Sik y Yuna es la canción más popera del drama y la que suena en los momentos divertidos. Es bastante pegadiza y en los días mientras estuve viendo el drama me sorprendí a mi misma tarareándola😅

En definitiva, Oh! My ladylord apuntaba maneras, podría haber sido una comedia romántica para disfrutar. Tenía buenos actores, buena química y una buena historia de amor, pero ese final tan poco acorde con el tono del resto del drama lo estropeó todo. Yo no se la recomendaría a nadie, es mejor buscar las escenas bonitas en youtube, que perder 16 horas viendo esto… Pero, tranquilos, no temais por mí, My Roommate is a gumiho está curando todas mis heridas 😂

PS: Por cierto, el juego de palabras del título con el nombre de la protagonista es muy gracioso, al menos a mí me lo parece con mi A1 de coreano 😅 La protagonista se llama 주인 (ju-in) que se escribe igual que «máster» o «dueño». El título dice «oh, máster», pero el nombre de ella está ahí metido en medio 😂

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